
El pasado miércoles día 31 de enero tanto el CEO de SARE (Sociedad Aragonesa de Rehabilitación Energética), Sergio Espinosa, como el director de desarrollo de negocio, Jacobo Caparrós, tuvieron una reunión en el ayuntamiento de Zaragoza con la alcaldesa Natalia Chueca y el concejal delegado de vivienda, José Miguel Rodrigo.
La reunión que se desarrolló en un ambiente cordial en el que se pudo presentar la empresa, SARE y el producto innovador que se usa para la rehabilitación de vivienda, RALIP (gránulos de poliuretano reciclado); además del plan de rehabilitación de vivienda que se está llevando por parte de SARE a nivel nacional con distintos socios, entre ellos grandes aseguradoras y fondos de inversión en Real Estate.
Por parte del ayuntamiento de Zaragoza se remarcó que un punto importante de su política municipal es la rehabilitación del parque inmobiliario y el acceso a la vivienda.
Sergio Espinosa, CEO de SARE, transmitió a la actual regidora y a su concejal que: “La rehabilitación de las viviendas es una necesidad de primer orden en los cascos urbanos, no solo por cuestión económica o medioambiental sino especialmente por una cuestión de salud”.
De ahí que SARE con su método de insuflado realizando un único agujero por paramento, siempre que no existan discontinuidades, se presente como una gran opción a la hora de rehabilitar, haciéndolo en menos tiempo y consiguiendo ahorros significativos.
En la reunión también se abordo el proyecto NEULTRALPATH, donde SARE es socio y contribuye rehabilitando la envolvente térmica de las viviendas, aportando unos porcentajes de ahorro energético muy favorables para el primer Distrito de Energía Limpia y Positiva (PCDE) en el distrito Actur-Rey Fernando.
Para SARE la rehabilitación supone apostar por un estilo de vida más saludable. Si tu confort mejora, tu calidad de vida también y eres más feliz; además de contribuir a un mundo mejor y más sostenible.
El actual modelo económico está basado en “tomar-fabricar-consumir-eliminar”. Este modelo es agresivo con el medio. Se hace por tanto necesario iniciar una senda de transición para pasar de la economía lineal, a la economía circular es aquella en la que el valor de los productos, los materiales y los recursos se mantienen en la economía durante el mayor tiempo posible. Es decir, se maximizan los recursos disponibles, para que estos permanezcan el mayor tiempo posible en el ciclo productivo.
Y todo ello con RALIP (Gránulos de poliuretano reciclado) lo conseguimos, porque partimos de un aislamiento térmico (la espuma de poliuretano) y se convierte en otro aislamiento con el objetivo de la rehabilitación completa de la envolvente térmica de las viviendas, para reducir el consumo energético, mejorar el confort y reducir las emisiones de CO2 del mismo.
Desde SARE te animamos a que contribuyas a hacer un mundo más sostenible.
En SARE integramos los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS)
